Pilar Payo Pérez
Toledo, 1954
Cuando era pequeña, su familia se trasladó a Madrid, y en la actualidad reside desde hace tiempo en Aranjuez. Siempre ha sido una soñadora, pero nunca ha dado nada por hecho, pues desde siempre sabía que, además de la imaginación, era importante el tesón y la disciplina.
Siendo muy joven comenzó a escribir poesía, era una manera de expresarse. Más tarde, cuentos y novelas, una de ellas, Tres Vidas, fue finalista de Premios Azorín.
Como profesional, pues la escritura solo formaba parte del ámbito personal, ha sido profesora, consiguiendo su Graduación mediante el trabajo y el estudio.
Con los años dejó la enseñanza para comenzar otra de sus vocaciones: la salud. Se graduó en Dietética y Nutrición Humana, y pudo poner sus conocimientos, durante 35 años, al servicio de muchos pacientes que necesitaron de su ayuda.
Al escribir, no solo cuenta con su experiencia, sino sobre todo con su imaginación, con la cual se adentra en ese mundo de ilusión que, desde pequeña, siempre estuvo con ella. Ya desde entonces, con una libreta y un lápiz, era feliz.