Yaiza Martí
Barcelona, 1989
Yaiza creció escogiendo su camino, pensando siempre en lo que se esperaba de ella, pero eso hizo que nunca encontrara su lugar. Finalmente, con casi 30 años y después de haber sido mamá, tomó la decisión de cambiar de rumbo y dedicarse a su verdadera vocación: la Educación Infantil. Ese paso le dio a la vez el coraje que necesitaba para comenzar a escribir de verdad, creyendo en lo que hacia. Hoy puede decir que ha conseguido unir dos sueños en uno, ya que escribe con la intención de que las niñas y los niños comprendan que en eso de sentirse diferentes o perdidos no están solos, y que no hay nada de malo en tardar un poquito más en darse cuenta de que todos y todas tenemos algo que nos hace especiales.