Valentín Camacho Trenado
Don Benito (Badajoz), 1975
Es sevillano de adopción, pues, cuando contaba con muy pocos años de edad, sus padres emigraron a Sevilla.
Les acogieron en el barrio de la Macarena, para tener la suerte de vivir, puerta con puerta, con un armao —y antes costalero de los dos pasos— , Pepe Silva Romero, quien donó su «sangre verde y morada» a los hermanos Camacho.
Valentín lleva más de 30 años perteneciendo a La Hermandad, de los cuales, quince ininterrumpidos formando parte de la pequeña familia del tramo de penitentes macarenos, quienes, con humildad y silencio, portan su cruz cada madrugá por las calles de Sevilla.
Casado con una trianera, reside en el barrio de su esposa desde hace ya más de una década.
Su mejor legado macareno lo forman sus hijos Claudia y Valentín, quienes siguen con la tradición familiar de acompañar a los Titulares de la Hermandad cada Semana Santa.