Noemí García Mota

Reside en Palma de Mallorca desde hace 32 años. Heredó de su madre el amor por la escritura. Con este libro quiere rendirle homenaje. Su perrita Lita ha sido y es su inspiración, su gran apoyo durante muchos años, por eso ha querido plasmar su gratitud hacia ella. Actualmente es administrativa, pero trabajó hace unos años como marinera, surcando las aguas de las Islas Baleares; de ahí su experiencia a la hora de escribir este libro, visto desde los ojos de una perrita intrépida. 

De carácter risueño, siempre positiva, con mucha imaginación y una gran intuición, supo cuál era el momento preciso para demostrar a todo el mundo que «sí se puede si se quiere». Y aquí está la muestra.