María Nieves Sánchez López
Ciudad Real, 1986
Soy de Almagro, actualmente vivo en Torralba de Calatrava un pueblo de Ciudad Real. Tengo 34 años, estoy casada, soy mamá de un niño de cinco años y mi cuento está basado en hechos reales. Cuenta la vida de mi hijo, el cual fue diagnosticado con TEA, con tan solo dos años y medio. Cuando nos comunicaron la noticia, para mí no fue inesperada, pues una madre tiene ese instinto que te dice que algo no va bien. Al principio fue duro porque no sabía cómo afrontarlo, y mucho menos comunicar a mis familiares y amigos esta «etiqueta impuesta» para mi hijo. Sin embargo, esa frustración y rabia la volqué en escribir cuentos, para poder desahogarme e intentar llevarlo lo mejor posible; trabajé duro con él, y todos los días me inventaba un juego nuevo, que a veces funcionaba y otras veces no, pero no me rendí. Y hoy lo estoy escribiendo para muchas mamás y papás, que si leen esto, quiero que sepan que les entiendo y sé lo que sienten cuando por las noches miran a su hijo en la cama y no saben cuándo les va a mirar o les va a poder hablar. Es muy duro, y eso solo lo sabemos cuando nos toca, pero siempre hay una luz, y esa mirada existe en todos los niños, así que no dejes nunca de buscarla, porque cuando la encuentras te das cuenta de que la diferencia existe, y entonces la verdad dejará de doler.