Amparo Martín Chaparro

Vivo en L´Hospitalet y veraneo en Villanueva de la Jara un pueblo de la Manchuela.
Desde mi primer empleo preparando pedidos, ya vi la magia de los cuentos...
Trabajé como educadora infantil en la escuela Garabatos, en el lugar más tierno e inocente que uno pueda imaginar. Por aquel entonces, el aula estaba distribuida por rincones. Había uno especial «EL RINCÓN DE LOS CUENTOS», en el cual, junto a los niños, buscábamos los valores que cada letra, dibujo o sonido que el cuento nos daba. Dejábamos volar la imaginación soñando por y con un mundo mejor.
Más tarde, como enfermera de hospital, dediqué mi tiempo al cuidado de personas mayores, donde todo era muy real.
Ahora, al nacer mi nieta, su alegría me hace recordar el pasado, y siento la necesidad de escribir y volver a soñar.